martes, 28 de enero de 2020

DTP/ 112 Estudio analiza los efectos de la dinámica familiar en la salud bucal







¿Qué tienen que ver la salud mental con la salud dental? Bastante, según Richard Heyman, PhD, y Amy Smith Slep, PhD, los psicólogos que se incorporaron a la Universidad de Nueva York Facultad de Odontología (NYUCD) en julio de 2011.
Profesores Heyman y Slep, que co-dirigen el grupo familiar de Investigación Traslacional en el Departamento del NYUCD de Atención Cariología y global, son parte de una tendencia creciente entre los dentistas que tratan de comprender cómo los factores psicológicos afectan a la salud oral, especialmente cuando se trata de descifrar el código sobre las causas de la caries de la primera infancia.
La facultad NYUCD incluye desde hace tiempo psicólogos, como Hillary Broder, PhD, que han tendido a centrarse en la enseñanza de los estudiantes de odontología para tratar a pacientes con sensibilidad y de comunicarse eficazmente con ellos. La investigación del profesor de Broder ha centrado en cómo afecta la calidad de la atención dental de un paciente de la vida. De acuerdo con Mark Wolff, DDS, PhD, profesor y director del Departamento de Atención NYUCD Cariología y global y decano asociado de la educación clínica predoctoral, «Hay un cambio importante ocurre en nuestras creencias sobre el impacto de los factores psicológicos tanto en las conductas del paciente y sobre la biología de la salud bucal.
Tenemos que preguntarnos cómo los eventos psicológicos se relacionan con la caries dental. Por ejemplo, cuando nos preguntamos por qué alguien no se cepilla, tenemos que pensar acerca de si él o ella sufre de depresión. » Muchos factores contribuyen a la intransigencia de la caries de la primera infancia. Ellos son la falta de educación de los padres o la aceptación de la caries como la falta normal de acceso a la atención dental, y la cobertura de seguro de los pobres.
Sin embargo, hasta ahora, la dinámica familiar no se han explorado de manera sistemática como un factor para la salud oral. A principios de 2008, el profesor Heyman fue contactado por un oficial de programas en el Instituto Nacional de Investigación Dental y Craneofacial (NIDCR), que forma parte de los Institutos Nacionales de Salud (NIH), porque la agencia estaba buscando para financiar nuevos enfoques para mejorar la salud bucodental. Profesores Heyman y Slep, quienes parejas de investigación en los conflictos, de inmediato se preguntó si sería posible averiguar si el conflicto está afectando la salud de sus sujetos de la investigación oral.
La investigación ya había demostrado que los conflictos de pareja pueden llevar a aumentos en la presión sanguínea, bajar el funcionamiento inmunológico y más lenta la curación de heridas. Profesores Heyman, Slep, y su grupo, había recopilado datos sobre cómo los factores familiares y ambientales afectan a los niños y los adultos la salud física y psicológica. No fue un tramo de preguntar si estos factores también impacto en la salud oral, sin embargo, nadie había investigado esta cuestión. Buscando un colaborador de la salud oral, los profesores se acercó a Heyman y Slep Decano Asociado de Wolff, y el equipo recibió una subvención del NIH de $ 1 millón, en 2009, para llevar a cabo un estudio.El equipo recopiló datos sobre cerca de 150 familias, tomando muestras de sangre y la saliva, la realización de exámenes físicos, y la administración de cuestionarios.
En septiembre de 2011, estaban listos para presentar los datos preliminares al Consejo NIDCR. Los investigadores encontraron que la agresión más verbal o física que se produjo entre los padres, los problemas de salud oral se produjo en el niño. La pregunta era: ¿Por qué?»Hay dos hipótesis sobre cómo la salud oral se ve afectada por la discordia de los padres,» dice el profesor Heyman. «En primer lugar la supervisión, laxa de los niños, como una consecuencia de la discordia, afecta directamente a los niños que comen cereales azucarados y bebidas, y el cepillado no. La segunda es una respuesta biológica. Existe una investigación sólida que muestra que los conflictos familiares y el estrés afectan el sistema inmunológico.»Crianza de los hijos Lax puede ser una influencia más fuerte sobre la caries dental que el comportamiento violento «, dice el Decano Asociado de Wolff.» Permitir a los niños a comer alimentos azucarados es algo que se ve incluso entre personas bien educadas. Tenemos que entender las causas psicológicas de la caries en los dientes para evitarlo.
Una conferencia simple cepillado no va a mejorar las cosas. Tienes que cambiar conductas de los padres. «Ahora, el profesor Heyman y el grupo Slep, junto con el asociado Wolff Dean y el Dr. NYUCD de Ananda Dasanayake, profesor de epidemiología y promoción de la salud, se están convirtiendo sus conclusiones en la acción, el desarrollo de una intervención para parejas en las que la discordia puede afectar a la salud oral de su muy joven niños.»El nacimiento de un nuevo bebé es un buen momento para intervenir con las familias, porque la investigación anterior ha demostrado que es cuando están más abiertos a los cambios en su relación de pareja», dice el profesor Heyman.»Las parejas se dan cuenta de que un bebé puede poner una tensión en su relación. El objetivo de la intervención consiste en reducir los factores de riesgo y recibir mensajes sobre el buen cuidado de la salud preventiva».
El NIDCR premió al equipo de planificación de un ensayo clínico de subvención para adaptar y poner a prueba una intervención que ha demostrado para ayudar a parejas a desarrollar relaciones más sanas con los demás y con sus hijos. La intervención se desarrolló en Australia y actualmente está siendo probado por el equipo. Universidad de Nueva York Facultad de Odontología investigadores quieren saber si esta intervención también se puede producir mejoras en la salud física y oral.Hasta 30 familias están siendo reclutados en las salas de maternidad en el Bellevue Hospital Center y Stony Brook University Hospital.
Los investigadores están buscando las familias cuyos hijos recién nacidos ya son consideradas en alto riesgo de mala salud oral, debido a los bajos ingresos familiares, los padres que no tienen más que una educación de escuela secundaria, y al menos uno de los padres no europeo-americana.
Las parejas que participan a ver segmentos de DVD en resolución de conflictos y la crianza saludable. También se le asignará un entrenador, que será el check in y ayudarles a mejorar su solución de conflictos y habilidades de los padres. Y van a terminar un libro que refuerza los mensajes con los ejercicios.Este proyecto es el primero en intervenir con los nuevos padres en múltiples niveles para prevenir las caries infantiles.
El objetivo es que, mediante la mejora de los ambientes nocivos de la familia, inculcando orales diarias promoción de la salud, los comportamientos en los niños, y alentar a los padres para llevar al niño a regular de chequeos dentales, salud de los niños por vía oral temprana será notablemente mejor de lo que es típico.La intervención de las parejas se lleva a cabo durante ocho sesiones, que están sincronizados para cruzarse con las etapas de desarrollo de su bebé, de tres a 12 meses.
Este calendario cubre el período de erupción de los dientes y la transición a las visitas al dentista recomendadas. También se refiere tanto al recién nacido y el niño y permite períodos de descansos entre las sesiones de las familias y el tiempo para revisar el material y consolidar sus conocimientos.
Para examinar el impacto en la salud bucal, exámenes dentales se llevará a cabo en los niños a los 15 meses.Los investigadores buscan directamente la caries de la primera infancia, así como factores contribuyentes, como las bacterias y saliva hormonas relacionadas con el estrés.
Fuente: Medical Press

















lunes, 27 de enero de 2020

DTP/ 111 En marcha la primera vacuna terapéutica para el tratamiento de la periodontitis





La periodontitis o ‘enfermedad de las encías’, comúnmente conocida como ‘piorrea’, es una patología básicamente caracterizada por la inflamación y sangrado de las encías. Una enfermedad que, más allá de causar la destrucción de la masa ósea que sustenta las piezas dentales y, por tanto, provocar la pérdida de los dientes, se asocia a un mayor riesgo de enfermedades muy graves y potencialmente mortales. Es el caso, entre otras, de las enfermedades cardiovasculares y de algunos tipos de cáncer. De ahí la importancia de un estudio dirigido por investigadores de la Universidad de Melbourne (Australia), en el que se confirma la eficacia de la primera vacuna específicamente diseñada para tratar la periodontitis grave.
Como explica Eric Reynolds, director de esta investigación publicada en la revista « NPJ Vaccines», «a día de hoy, el tratamiento de la periodontitis se lleva a cabo mediante una limpieza profesional que en ocasiones requiere de cirugía y de la administración de antibióticos. Un método que resulta eficaz. Sin embargo, la bacteria vuelve a aparecer en la placa dental en muchas ocasiones, lo que causa un desequilibrio microbiológico y la reaparición de la enfermedad».

Anular las gingipaínas

Para llevar a cabo el estudio, los autores utilizaron un modelo animal –ratones– infectado con ‘Porphyromonas gingivalis’, bacteria que libera enzimas que provocan un desequilibrio en las especies bacterianas que se encuentran en la placa dental y provocan la aparición de la periodontitis.
Y exactamente, ¿qué hace la nueva vacuna? Pues actúa específicamente sobre unas enzimas denominadas ‘gingipaínas’ que son producidas por ‘P. gingivalis’, poniendo así en marcha una respuesta inmune –o lo que es lo mismo, la producción de anticuerpos– que neutraliza estas enzimas tóxicas. Un aspecto crucial dado que estas gingipaínas juegan un papel clave en la destrucción del tejido periodontal, lo que provoca la pérdida de los dientes.
Y esta vacuna en la que los autores llevan trabajando cerca de 15 años, ¿es realmente eficaz? Pues parece que sí, y mucho. De hecho, como apuntan los propios investigadores, «nuestros resultados muestran que esta vacuna, la primera de su tipo a nivel mundial, podría eliminar la periodontitis grave o, cuando menos, reducir la necesidad de cirugía y tratamiento antibiótico».
Lógicamente, y dado que el estudio fue llevado a cabo con un modelo animal, debe requerirse que los resultados sean confirmados en seres humanos. Y para ello, los autores esperan poner en marcha un ensayo clínico en el año 2018.
Como concluye Eric Reynolds, «tenemos grandes esperanzas en que esta nueva vacuna pueda mejorar la calidad de vida de millones de pacientes en todo el mundo».
Fuente: ABC 




miércoles, 22 de enero de 2020

DTP/ 110 Problemas Relacionados Con Los Tonsilolitos Y El Mal Aliento






¿Cuál es el problema de los tonsilolitos? El mal aliento, la irritación y una mancha blanquecina en la parte posterior de la garganta son algunos indicios de la presencia de tonsilolitos o piedras en las amígdalas. Pero, ¿deberías preocuparte especialmente? Los cálculos amigdalinos no se presentan en todas las personas, y muchas que sí los tienen no sienten ninguna molestia. Si te preocupan esas protuberancias blancas que aparentan estar incrustadas en las amígdalas, aquí encontrarás todo lo que siempre quisiste saber de los tonsilolitos.
Cuáles son las causas de los cálculos amigdalinos
Cuando abres la boca y dices "ahhh", por lo general, puedes ver dos glándulas, conocidas como amígdalas, ubicadas al fondo de la cavidad bucal. Las amígdalas ayudan al sistema inmunitario filtrando los virus o las bacterias que ingresan al cuerpo por la boca o, como señalan los especialistas de la Academia Americana de Otorrinolaringología, las amígdalas son "la primera línea de defensa del cuerpo".
Aunque pueda sonar un tanto repugnante, las amígdalas están recubiertas por mucosa, que es la misma que recubre el interior de la boca. A lo largo de este revestimiento, se encuentra una serie de fosas y criptas. La cantidad de criptas de las amígdalas varía de persona a persona. Los restos de comida, las bacterias y otros desechos pueden quedar atascados en estas criptas o fosas. Los desechos se calcifican o se endurecen y se convierten en un tonsilolito. Si presentas inflamación o irritación en las amígdalas con frecuencia, es más probable que se te formen cálculos amigdalinos.
¿Son causa del mal aliento?
Muchas personas que tienen estos cálculos no presentan ningún tipo de problema. Como se informó en un estudio publicado en 2013 en la revista Journal of Clinical and Diagnostic Research, los cálculos amigdalinos son poco comunes y muy pequeños cuando aparecen. A pesar de que muchas personas que tienen cálculos amigdalinos no presentan síntomas e incluso ni siquiera los pueden ver, es posible que el mal aliento y otros signos y síntomas estén asociados con estas protuberancias.
Los tonsilolitos pueden ser los responsables de la halitosis, y podría estar vinculada a aproximadamente el 3 por ciento de los casos de mal aliento, según se indicó en una reseña publicada en 2014 en la revista Otolaryngology Head and Neck Surgery. En la reseña también se señaló que deberían realizarse más investigaciones para determinar cuán importante es el rol que cumplen los cálculos amigdalinos y las amígdalas en el origen del mal aliento.
Otros problemas relacionados con los tonsilolitos
Cuanto más grande sea el cálculo amigdalino, mayores serán las posibilidades de que provoque síntomas, según se indicó en un informe de caso publicado en 2014 en la revista Journal of Surgical Case Reports. En el informe de caso se compartió la historia de una paciente de 17 años que tenía disfagia o dificultad para tragar. Los médicos que la atendían le descubrieron un cálculo amigdalino grande en la amígdala izquierda. Los médicos le extirparon tanto el tonsilolito como las amígdalas.
Qué puedes hacer ante su presencia
Mal aliento, dificultad para tragar e inflamación. Los tonsilolitos no son para nada divertidos. La buena noticia es que es poco frecuente que los cálculos amigdalinos generen problemas. La mejor noticia es que puedes evitarlos.
Si te cepillas los dientes con regularidad, se eliminarán de la boca los restos de los alimentos, las bacterias y otros desechos antes de que puedan quedar atascados en las amígdalas. Si te preocupa el mal aliento, ya sea que esté o no relacionado con los cálculos amigdalinos, hazte enjuagues bucales con un colutorio para refrescar el aliento y así eliminar la mayoría de las bacterias de la boca.
Si los cálculos amigdalinos te causan muchas molestias u otros problemas, te recomendamos que consultes con el odontólogo o el médico. Aunque ya no se realiza con tanta frecuencia como antes, en ocasiones, una amigdalectomía (extirpación quirúrgica de las amígdalas) es la mejor opción para prevenir los tonsilolitos y cualquier otro problema que generen las amígdalas.
Piensa en las amígdalas como si fueran el apéndice de la boca. Ayudan al sistema inmunitario, pero si te causan problemas, puedes vivir sin ellas.
La finalidad de este artículo es fomentar la comprensión y el conocimiento de temas generales de salud oral. Su propósito no es sustituir la opinión, el diagnóstico o el tratamiento profesionales. Solicita siempre la opinión experta de tu dentista u otro proveedor de salud Calificado y Dile siempre cualquier pregunta que tengas en relación con alguna enfermedad o tratamiento médico.
Fuente: Colgate





martes, 21 de enero de 2020

DTP / 109 Dormir bien, clave para tener buena salud bucal




Durante una noche de placentero sueño, tienen lugar importantes funciones regenerativas, de las que se nutren diferentes sistemas y procesos de nuestro organismo. El sistema inmune se ve fortalecido, la musculatura se relaja y se realizan importantes acciones de depuración, por todo ello, la salud de nuestra boca es una de las grandes beneficiadas.
La salud bucal y un descanso deficiente, directamente relacionados
En contraposición a lo anteriormente señalado, enfermedades y trastornos que ocurren mientras dormimos están directamente relacionados con disfunciones en la cavidad bucofaríngea o comportamientos y movimientos que implican partes de la boca.
Apretar y rechinar los dientes mientras dormimos: el bruxismo
El bruxismo se trata de una parasomnia (conductas anómalas que ocurren mientras dormimos) aunque no es un fenómeno que exclusivamente aparece durante el sueño. Está provocado por diferentes factores, dentro de los cuales el estrés parece ocupar un destacado papel.
Pasarse un buen número de horas de sueño rechinando los dientes y los músculos mandibulares, provoca rotura y rozamiento en los dientes, dolores en los músculos faciales (que nos acompañarán durante todo el día siguiente), heridas en el interior de la boca por la presión ejercida…etc.
Conviene consultar con nuestro odontólogo de cabecera qué medidas llevar a cabo en el caso de sospechar que padecemos bruxismo cuando dormimos
Tratar la apnea del sueño desde la consulta del dentista.
A grandes rasgos, la apnea del sueño consiste en paradas respiratorias involuntarias mientras la persona duerme, debido a una obstrucción en el paso del aire. En consecuencia, al día siguiente la persona se encuentra cansada y somnolienta, con el subsiguiente malestar que provoca una mala noche, ya que este tipo de trastorno causa microdespertares continuos que alteran la sucesión de las diferentes fases del sueño. Además de un sueño de baja calidad y poco reparador, la apnea está asociada a los ronquidos y a una deficiente oxigenación celular.
Existen dispositivos no invasivos y desarrollados por equipos conjuntos de odontólogos, neumólogos y otorrinos, que sirven para tratar los casos de apnea leve y moderada.
La higiene bucal antes de ir a dormir
Fundamental, antes de ir a dormir para cuidar la salud de la boca y los dientes, un buen cepillado. Durante la noche la producción de saliva decrece y nuestra boca es más propensa a sufrir los ataques de bacterias, que aprovecharán aproximadamente las 8 horas que solemos dormir para hacer de las suyas. 


DTP/ 108 DOS INVESTIGACIONES RELACIONAN LA FALTA DE SUEÑO Y LA PLACA DENTAL CON EL ALZHÉIMER




El alzhéimer, una de las enfermedades más crecientes y más desconocidas (40.000 casos nuevos cada año en España, con un total de 800.000 afectados) avanza, un paso más, hacia la erradicación gracias a estos dos novedosos y rompedores estudios que relacionan el padecimiento de esta enfermedad a factores tan dispares, como a priori irrelevantes, como son la falta de sueño y la placa dental producida por una bacteria que causa gingivitis.
El estudio se basa en dos ensayos en animales y muestras humanas, que han permitido esclarecer algo más la base científica de la enfermedad: la acumulación de dos proteínas en el cerebro, más concretamente en el espacio intersticial entre neuronas, de dos proteínas, la tau y la beta-amiloide. Si bien este hecho ya era conocido, la importancia de estos dos estudios llevados a cabo por sendos laboratorios americanos, es relacionarlo directamente con estos dos inesperados factores.
Uno de estos estudios, el llevado a cabo por un Laboratorio de la Universidad de Washington en San Luis (Misouri), midió la proteína tau en el cerebro de ratones y en el líquido cerebroespinal de personas. En los animales se observó una relación directa entre la cantidad de esta proteína y el estado de vigilia. Durante el sueño, la segregación de tau baja, y cuando el animal se despierta, esta aumenta hasta un 90%, en condiciones normales. Si se somete al roedor a un periodo de vigilia forzado (30 horas o más), la concentración sube hasta duplicar el nivel durante el sueño. En los humanos se da un proceso similar. Esta variación en la tau se une al de la otra proteína que se considera clave en el desarrollo del alzhéimer, la beta-amiloide, de la que también se ha descrito una relación con la falta de sueño.
El segundo estudio se trata de un trabajo publicado por la reputada revista Science Advances, da una explicación de por qué se produce el aumento de la beta-amiloide. El estudio relaciona el alzhéimer en ratones con la Porphyromonas gingivalis, una bacteria «clave en la periodontitis crónica», como la definen los autores del trabajo, que firma en primer lugar Stephen S. Dominy, profesor asociado de la Universidad de California en San Francisco y cofundador de la empresa Cortexyme, creada precisamente para explotar este tipo de trabajos. David Herrera, profesor de la Universidad Complutense de Madrid y experto de la Sociedad Española de Periodoncia (SEPA) afirma que el trabajo es «un golpe de mano en un campo en el que llevábamos trabajando 15 años». «La relación de la periodontitis y el alzhéimer se estudiaba desde hace tiempo, pero en el artículo se fija el mecanismo de la interacción», añade.
Si bien es cierto que estos estudios suponen un innegable avance en la investigación de esta enfermedad, los expertos advierten de que hechos como pasarse la noche en vela no deben asociarse directamente con un futuro desarrollo de Alzhéimer, pero puede ser una buena forma de prevenir la enfermedad cuidar la placa dental y tener un mínimo de horas de sueño.




lunes, 20 de enero de 2020

DTP/107Una mala mordida se asocia con peor control de la postura y el equilibrio




A pesar del tecnicismo, el término oclusión dental está cada vez más en la cabeza de muchos pacientes tras una simple visita al dentista. En las consultas se diagnostican problemas relacionados con una mala mordida, tales como desviaciones de la línea media, diastemas, apiñamiento, mordida cruzada y dientes ausentes.
La oclusión dental no es ni más ni menos que el contacto que se establece entre los dientes superiores e inferiores al cerrar la boca. Pueden encontrarse perfectamente alineados o presentar alteraciones a distintos niveles.
Dos nuevas investigaciones, llevadas a cabo en colaboración entre el departamento de Fisiología de la Universidad de Barcelona y la Universidad de Innsbruck (Austria), confirman una relación menos obvia entre una mordida imperfecta y el control de la postura.
Otro dato a destacar es que aunque esta relación pueda resultar estadísticamente baja, está aumentada cuando existen condiciones de fatiga en la persona, o cuando se dan condiciones de inestabilidad.
Cuando existe una mala oclusión, esta se clasifica por criterios establecidos científicamente. Lo relevante en el estudio es que se ha relacionado además con diferentes alteraciones motoras y fisiológicas”, explica a Sinc Sonia Julià-Sánchez, autora principal de los trabajos e investigadora en la institución catalana.
Ambos estudios, cuyos resultados han sido publicados en Motor Control y Neuroscience Letters, aportan datos concluyentes de que con la corrección de diferentes maloclusiones, llevando la posición mandibular a un punto neutro, se mejora el control postural tanto en equilibrio estático como en dinámico.
En el día a día esta relación no se aprecia tan directamente en condiciones estáticas, aunque pueden existir condiciones asociadas a patologías, como la obesidad, que agraven la inestabilidad corporal empeorando el control de la postura e incrementando el riesgo de caídas.
En deportistas, esta relación puede ser determinante tanto en el rendimiento final como en la prevención de lesiones como torceduras, distensiones y fracturas, por desequilibrios inesperados a medida que la fatiga es mayor y la capacidad de respuesta motora disminuye.
Por ello, sería útil que tanto la población general como los deportistas valoren la posibilidad de corregir la oclusión dental para mejorar el control de la postura, evitando así posibles caídas o desequilibrios debido a una falta de reacción del sistema motor”, añade Julià-Sánchez.
Influencia recíproca
El control de la postura es el resultado de un complejo sistema que incluye diferentes componentes sensores y motores que provienen de la información visual, somatosensorial y vestibular”, explica la experta.
En los últimos años ha crecido el interés científico por la relación entre el sistema estomatognático (el conjunto de órganos y tejidos que permiten comer, hablar, masticar, deglutir y sonreír) y el control de la postura.
El vínculo puede tener una explicación neurofisiológica. Existe una influencia recíproca entre el nervio trigémino y el núcleo vestibular –responsables de la función masticatoria y el control del equilibrio respectivamente–, y también entre los músculos masticatorios y cervicales.

Esta influencia explicaría que las maloclusiones dentales perjudiquen el control de la postura. Pero hasta ahora las investigaciones no habían conseguido ser concluyentes.
El problema principal deriva de que la mayoría de estos estudios habían valorado el equilibrio de manera estática y en condiciones de total estabilidad, lo que en la práctica tiene poca aplicación real sobre el control de la postura en acción”, apunta Julià-Sánchez.
En un primer estudio se tuvo en cuenta el tipo de oclusión dental y si había existido un tratamiento de ortodoncia previo. Los resultados mostraron que las alteraciones en la alineación de los dientes se relacionaban con un peor control del equilibrio estático.
El segundo trabajo valoró el tipo de oclusión dental, el control de la postura y la fatiga física para analizar la posible relación entre estos factores. El análisis mostró que el equilibrio mejoraba cuando las maloclusiones se corregían, y que estas influían más en el control de la postura en condiciones de fatiga que en reposo.
Cuando los sujetos estaban cansados equilibraban peor tanto en condiciones estables como inestables. En condiciones estáticas, el factor que influyó más en el desequilibrio fue la fatiga. Por el contrario, en condiciones de máxima inestabilidad, se apreció una relación significativa entre agotamiento y oclusión dental”, concluye Julià-Sánchez.
Fuente: Sinc



DTP/106 La ciencia ignora enfermedades dentales de 3.500 millones de personas





Las caries, las enfermedades de las encías y el cáncer bucal afectan a más de 3.500 millones de personas en el mundo, pero han sido ignorados por la comunidad mundial de salud, según un estudio difundido el jueves.
Las enfermedades bucales no tratadas son la condición de salud más común en el mundo, según dos investigaciones y dos comentarios que serán publicados en la revista científica The Lancet el 20 de julio.
Los cánceres del labio y de cavidades orales están entre los 15 tipos de cáncer más comunes en el mundo, afirma la investigación en la que participó Cristin Kearns, profesora de la Escuela de odontología de la Universidad de California en San Francisco y del Instituto de Estudios de Políticas de Salud Philip R. Lee.
En Estados Unidos, el 27 % de los adultos presentan caries dentales que no han sido tratadas, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Los investigadores abogan por "cerrar la separación entre salud dental y salud general, educar y entrenar la fuerza laboral dental futura en prevención y en combatir las desigualdades en la salud oral, con políticas de acceso e inclusión".
En un comentario en relación con los estudios, Kearns señaló este jueves que muchas organizaciones de investigación dental "apenas están cayendo en cuenta" de que sus estudios no se han enfocado en el consumo de azúcar y su relación con la salud bucal.
"Las organizaciones de investigación dental han caído en cuenta recientemente que su actividad de investigación no se ha enfocado en los azúcares durante muchos años", agregó la investigadora, que trabajó conjuntamente con Lisa Bero, de la Universidad de Sydney (Australia).
Para Kearns, muy pocas personas "se dan cuenta de que estas organizaciones (de investigación) tienen relaciones con compañías globales de dulces, helados, bebidas azucaradas y refrigerios".
Así, empresas como Cloetta y Nordic, grandes productoras de confites, Unilever que entre sus productos comestibles incluye helados y bebidas azucaradas y Wrigley, líder de la producción de chicles y dulces, son miembros de la Organización Europea para la Investigación de las Caries (ORCA), señaló Kearns.
De igual forma, entre los miembros corporativos de la Asociación Internacional para la Investigación Dental (IADR) figuran Unilever al igual que Mondelez International (antes Kraft Foods), una de las más grandes empresas productoras de refrigerios.
Se necesita, por lo tanto, que las entidades de investigación muestren más claridad al informar sobre posibles conflictos de interés en la financiación de sus investigaciones, afirmaron las expertas.
Fuente: elPeriódico



DTP/ 105 Los colutorios no sustituyen al cepillado dental




  • Los enjuagues bucodentales solo deben usarse si los prescribe un dentista.

  • Los colutorios no deben usarse en solitario, sino como complemento a los dos cepillados diarios -como mínimo- con pasta dentífrica fluorada.





Madrid, 10 de enero de 2020. Ante los numerosos anuncios de colutorios que publican y emiten los medios de comunicación, el Consejo General de Dentistas de España, presidido por el Dr. Óscar Castro Reino, recuerda, una vez más, que el uso de estos productos debe reservarse para aquellos casos clínicos en los que el dentista lo estime necesario.
Es indudable que ciertos colutorios tienen efectos beneficiosos para la salud bucodental, como la reducción del riesgo de caries o la eliminación de placa bacteriana. Sin embargo, estos efectos positivos no deben eludir la imprescindible prescripción del dentista por las posibles consecuencias negativas que algunos de estos productos pueden suponer, por ejemplo, tinciones amarillentas en los dientes, alteraciones del gusto y, sobre todo, lo más importante, la posibilidad de enmascarar determinadas lesiones que pueden ser graves.
Asimismo, se insiste en que los colutorios siempre han de usarse como complemento o parte de un plan de prevención o terapéutico, nunca como sustituto del cepillado dental, que debe realizarse dos veces al día, como mínimo, con pasta dentífrica fluorada, acompañado del uso de seda dental o cepillos interdentales.
Por último, el Dr. Castro insiste en que para evitar que los ciudadanos utilicen cualquier producto sanitario sin indicación de un facultativo, es necesario que se apruebe una ley de publicidad sanitaria para que todos los mensajes publicitarios que lleguen a la población estén basados en la evidencia científica. Además, deberán incluir las advertencias y precauciones que sean necesarias para informar al paciente de los posibles efectos adversos o riesgos derivados de la actividad o producto sanitario anunciado.
Fuente: Consejo de Dentistas de España

domingo, 19 de enero de 2020

DTP/104Los padres transmiten el miedo al dentista a sus hijos



Cuando somos pequeños aprendemos a percibir el mundo a través de nuestros padres, y debido a ello acabamos por heredar sus fobias y miedos, pues todo lo que ellos temen es interpretado como un peligro potencial. Ahora, un estudio publicado en la revistaInternational Journal of Paediatric Dentistry ha demostrado estadísticamente que el miedo al dentista se transmite de padres a hijos. Por eso, si te entran sudores fríos cada vez que piensas en el sillón del odontólogo, probablemente no serás el único de tu familia en tener esa sensación.


Los investigadores, de la Universidad Carlos III de Madrid, analizaron a 183 niños de entre 7 y 12 años y a sus padres y encontraron que, como se esperaba, los niveles de miedo de progenitores e hijos están correlacionados. Además, el estudio explora los
 roles diferenciados de padres y madres en la transmisión del miedo. "Aunque los resultados deben tomarse con las debidas cautelas, los niños parecen atender fundamentalmente a las reacciones emocionales de sus padres para decidir si los eventos dentales son potencialmente estresantes", explica Lara Salcido a SINC. De esta forma, el padre puede mediar en la transmisión del miedo de la madre al hijo, ya que su reacción frente al dentista puede incrementar o reducir la ansiedad que experimenta el niño.
"De cara a la atención en la clínica odontológica, el trabajo con los padres es fundamental. Que los padres vengan tranquilos es tan interesante como procurar directamente que el niño se relaje", indica Salcido. "Por la vía del contagio emocional positivo en la familia se podría llegar a inducir en el niño el estado adecuado que facilite la atención dental".





































Los padres transmiten el miedo al dentista a sus hijos

Cuando somos pequeños aprendemos a percibir el mundo a través de nuestros padres, y debido a ello acabamos por heredar sus fobias y miedos, pues todo lo que ellos temen es interpretado como un peligro potencial. Ahora, un estudio publicado en la revistaInternational Journal of Paediatric Dentistry ha demostrado estadísticamente que el miedo al dentista se transmite de padres a hijos. Por eso, si te entran sudores fríos cada vez que piensas en el sillón del odontólogo, probablemente no serás el único de tu familia en tener esa sensación.

Los investigadores, de la Universidad Carlos III de Madrid, analizaron a 183 niños de entre 7 y 12 años y a sus padres y encontraron que, como se esperaba, los niveles de miedo de progenitores e hijos están correlacionados. Además, el estudio explora los
 roles diferenciados de padres y madres en la transmisión del miedo. "Aunque los resultados deben tomarse con las debidas cautelas, los niños parecen atender fundamentalmente a las reacciones emocionales de sus padres para decidir si los eventos dentales son potencialmente estresantes", explica Lara Salcido a SINC. De esta forma, el padre puede mediar en la transmisión del miedo de la madre al hijo, ya que su reacción frente al dentista puede incrementar o reducir la ansiedad que experimenta el niño.
"De cara a la atención en la clínica odontológica, el trabajo con los padres es fundamental. Que los padres vengan tranquilos es tan interesante como procurar directamente que el niño se relaje", indica Salcido. "Por la vía del contagio emocional positivo en la familia se podría llegar a inducir en el niño el estado adecuado que facilite la atención dental".Fuente: muy interesantehttps://www.muyinteresante.es/salud/articulo/los-padres-transmiten-el-miedo-al-dentista-a-sus-hijos





Los padres transmiten el miedo al dentista a sus hijos

Cuando somos pequeños aprendemos a percibir el mundo a través de nuestros padres, y debido a ello acabamos por heredar sus fobias y miedos, pues todo lo que ellos temen es interpretado como un peligro potencial. Ahora, un estudio publicado en la revistaInternational Journal of Paediatric Dentistry ha demostrado estadísticamente que el miedo al dentista se transmite de padres a hijos. Por eso, si te entran sudores fríos cada vez que piensas en el sillón del odontólogo, probablemente no serás el único de tu familia en tener esa sensación.

Los investigadores, de la Universidad Carlos III de Madrid, analizaron a 183 niños de entre 7 y 12 años y a sus padres y encontraron que, como se esperaba, los niveles de miedo de progenitores e hijos están correlacionados. Además, el estudio explora los
roles diferenciados de padres y madres en la transmisión del miedo. "Aunque los resultados deben tomarse con las debidas cautelas, los niños parecen atender fundamentalmente a las reacciones emocionales de sus padres para decidir si los eventos dentales son potencialmente estresantes", explica Lara Salcido a SINC. De esta forma, el padre puede mediar en la transmisión del miedo de la madre al hijo, ya que su reacción frente al dentista puede incrementar o reducir la ansiedad que experimenta el niño.
"De cara a la atención en la clínica odontológica, el trabajo con los padres es fundamental. Que los padres vengan tranquilos es tan interesante como procurar directamente que el niño se relaje", indica Salcido. "Por la vía del contagio emocional positivo en la familia se podría llegar a inducir en el niño el estado adecuado que facilite la atención dental".Fuente: muy interesantehttps://www.muyinteresante.es/salud/articulo/los-padres-transmiten-el-miedo-al-dentista-a-sus-hijos


viernes, 17 de enero de 2020

DTP/103 ¿Mal aliento? 10 razones y soluciones para tu halitosis (o la de alguien más)







¿Estás fallando con regularidad la “prueba del olor”, en la que a escondidas soplas entre tus manos para revisar tienes mal aliento?
(Pista: si puedes olerlo, entonces tu aliento es totalmente desagradable, ya que la mayoría de personas no suelen percibirlo por sí mismas, según dicen los odontólogos).
En caso de que el olor de tu boca califique como apestoso, debes saber que tú y el resto de personas que te rodean son víctimas de la halitosis, un aliento tan repulsivo que solo podría atraer a los buitres y las moscas.
Pero, tranquilo, no eres el único: hasta 80 millones de personas sufren de mal aliento crónico, según la Academia de Odontología General.
Además del impacto obvio en tu popularidad, la halitosis también puede ser un signo de enfermedades y ciertas condiciones de salud, algunas de las cuales son graves.
Entonces, mientras corres a conseguir una menta, podría ser útil saber las 10 razones principales por las que tu boca huele tan mal y qué hacer para remediarlo.
1. Te estás cepillando mal los dientes
Sí, la mala higiene bucal es una de las principales causas del mal aliento. Cuando la comida queda atrapada entre los dientes y debajo de las encías, las bacterias se dedican a descomponerla, lo que genera gases putrefactos que huelen como huevos podridos o incluso algo peor (sí, como popó).
Según los dentistas, una manera de saber si tienes mal aliento es usar hilo dental y después olerlo. Si percibes una sensación fétida, entonces sabrás definitivamente que tu soplo es tóxico.
La buena noticia es que puedes corregir fácilmente este tipo de halitosis al lavarte los dientes con pasta dental que tenga fluoruro dos veces al día y usar hilo dental con regularidad. Mientras te estés cepillando, no olvides pasar por tu lengua y mejillas: los estudios demuestran que cepillarlos puede reducir la carga de bacterias.
2. Comiste o bebiste algo oloroso
Café. Ajo. Pescado. Huevos. Cebolla. Comida picante. Los alimentos que ingerimos pueden causar fácilmente el mal aliento.
Muchos de los alimentos que contribuyen a una boca apestosa lo hacen por la liberación de sulfuros. El azufre, como sabes, huele a huevos podridos.
Una menta o un chicle podrían enmascarar la halitosis, pero ten cuidado: los olores de algo de que comiste pueden permanecer hasta que los alimentos son digeridos por tu sistema, incluso si te cepillaste después. Entonces, intenta contraatacar con otros alimentos como limón, perejil, manzanas o zanahorias que estimulan la producción de saliva, componente del que depende tu boca para eliminar las impurezas. ¡Tomar agua también ayuda! Mientras que el café, por el contrario, ralentiza la producción de saliva.
3. Comes muchos dulces
Antes de comerte ese próximo dulce, pastel o galleta presta atención. Es posible que llegues a escuchar el coro de felicidad de las bacterias que viven en tu boca. Para ellas, el azúcar es un súper alimento y sí que se dan un festín descomponiéndolo mientras te dejan un mal aliento de recuerdo.
Los odontólogos explican que los dulces adherentes como las gomitas y los caramelos son los peores. Entonces, si debes comer algo dulce, te sugieren chocolate puro. Tiene menos azúcar que muchos otros dulces y se disuelve más rápidamente en la boca.
4. Estás haciendo una dieta baja en carbohidratos
Comer mucha proteína y pocos carbohidratos lleva a que el cuerpo entre en estado de cetosis, es decir, cuando tu sistema comienza a quemar las células de grasa para obtener energía.
Este proceso crea desechos llamados cetonas. Y tener demasiadas no es algo bueno: tu metabolismo no tiene más remedio que convertirte en una apestosa casa andante, que excreta cetonas a través de la orina y el aliento. Es un olor de rancio, que muchos comparan con la fruta podrida.
La recomendación es tratar de beber agua extra para eliminar las cetonas de tu cuerpo. Si usa mentas para el aliento, caramelos o chicles, asegúrate de que no contengan azúcar.
Durante la noche, la producción de saliva disminuye. Esa es la razón por lo que muchas personas se despiertan con un sabor (y un olor) desagradable en la boca, incluso después de cepillarte y usar hilo dental juiciosamente.
Ahora, respirar por la boca o roncar, también la apnea del sueño, seca aún más la boca, lo que hace que tu aliento resulte más infame. Llamada xerostomía, tener la boca seca no solo es desagradable sino también potencialmente dañino. Puedes desarrollar dolor de garganta, ronquera, dificultad para hablar y tragar, problemas para usar dentaduras postizas e incluso un cambio en tu sentido del gusto.
La solución: al fondo de tu problema de respirar por la boca y resuélvelo con mucha agua y siguiendo una buena rutina de higiene dental tanto por la mañana como por la noche.
Por supuesto, los dentistas también sugieren chequeos regulares. No sientas timidez ni vergüenza. Si le cuentas a tu dentista sobre este problema, él o ella puede ayudarte a identificar la causa.
6. Las medicinas que tomas tienen parte de la culpa
Cientos de medicamentos de uso común pueden resecar tu boca, contribuyendo a un aliento repugnante. Algunos de los que más generan esta situación son las medicinas para tratar la ansiedad, la depresión, la hipertensión y el dolor y la tensión muscular.
Entonces, consulta la lista de efectos secundarios de tus medicamentos para comprobar si provocan resequedad en la boca, y después habla con tu médico sobre la posibilidad de cambiar a otra medicina que no disminuya la saliva.
7. Sufres de congestión nasal o alergias
¿Tienes infecciones crónicas de sinusitis? ¿Enfermedades respiratorias? A medida que tu nariz se congestiona, es más probable que respires por la boca, resecando los tejidos y reduciendo el flujo de saliva.
Además, si sufres tiene alergias, la lucha para detener el goteo constante de tus mocos con un antihistamínico también puede provocarte mal aliento. Muchos de los medicamentos recetados y de venta libre para combatir los resfriados, la gripa y las alergias secan más que solo la nariz.
Además, todo ese goteo nasal puede causar un mal olor al quedar atrapado en la parte posterior de la lengua, que es increíblemente difícil de alcanzar con un cepillo de dientes. Los odontólogos recomiendan raspar la parte posterior de la lengua con una herramienta especialmente diseñada y usar un enjuague bucal que contenga dióxido de cloro.
8. Fumas o masticas tabaco (u otras cosas)
Si eres es fumador, probablemente no tienes ni idea cómo el olor a tabaco se adhiere a tu ropa y pertenencias… y especialmente a tu aliento. Ingerir el humo caliente disminuye tus sentidos, y por lo tanto tu capacidad de oler y saborear.
Obviamente, el aire caliente también resecará la boca. La pérdida de saliva, combinada con el olor a tabaco, crea el infame “aliento de fumador”. De la misma manera, fumar o ingerir marihuana afecta tu boca al reducir la saliva.
¿Masticas tabaco? Es obvio que tus dientes se mancharán, tus encías sufrirán y tu aliento apestará.
¿La solución? Ya sabes.
9. Consumes alcohol
Sí, todavía estamos hablando de cosas que resecan la boca. Eso, amigos amantes del vino, cerveza, cocteles, incluye el alcohol. Por no mencionar que el vino contiene azúcar, como muchos de los mezcladores que vienen en los cocteles. ¿Si oyes los gritos de alegría de las bacterias en tu boca?
Contraataca con caramelos o chicles sin azúcar, ya que ambos estimulan la producción de saliva. No te olvides de beber agua (también es bueno para prevenir las resacas), cepillarte y usar hilo dental lo antes posible.
Pero aquí hay una ironía: muchos enjuagues bucales contienen alcohol. Así que si la halitosis no te deja en paz, habla con tu dentista sobre el uso de un enjuague bucal terapéutico diseñado para reducir la placa.
10. Tienes una condición médica que quizás no conoces
¿Sufres acidez estomacal, reflujo ácido o gastroesofágico? Vomitar un poco de comida o ácido en la boca puede crear mal aliento. No taches eso como simplemente grosero; el reflujo gastroesofágico no tratado puede convertirse fácilmente en una enfermedad grave, incluso en cáncer.
El mal aliento también puede ser un signo temprano de una enfermedad subyacente que tal vez no tiene síntomas externos.
Uno de los signos de la cetoacidosis diabética, una afección potencialmente mortal que afecta principalmente a las personas con diabetes tipo 1, es el aliento con olor a fruta. Ocurre porque las personas con poca o ninguna insulina no pueden procesar los ácidos cetónicos, lo que les permite acumular niveles tóxicos en la sangre.
El aliento de olor dulce en una persona con diabetes tipo 1 debe llevar una acción médica inmediata. En casos inusuales, las personas con diabetes tipo 2 también pueden desarrollar la enfermedad.
Quienes padecen insuficiencia renal crónica grave pueden tener un aliento parecido al amoníaco, que según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, también se puede describir como “similar a la orina o al pescado”.
Un signo de enfermedad hepática es el hedor hepático, un olor fuerte, dulce y mohoso en el aliento. Se produce porque un hígado enfermo no puede procesar completamente el limoneno, un químico que se encuentra en las cáscaras de los cítricos y en algunas plantas. Los científicos están tratando de desarrollar una prueba de aliento basada en el olor que pueda alertar a los médicos sobre la cirrosis hepática en etapa temprana para poder tratarla.





domingo, 12 de enero de 2020

DTP/102"Una Odontología digital exige al profesional salir de la zona de confort"


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Como en otros ámbitos de la sanidad, la Odontología está viendo cambiar su forma de proceder gracias a la digitalización. La actualización de los profesionales, la obsolescencia de los equipos y los retos que todavía plantea esta transformación digital, son algunas de las cuestiones que preocupan a todos los miembros del sector. Para abordar todos estos asuntos, Redacción Médica ha reunido a cuartro expertos de diferentes áreas de la Odontología que han debatido sobre qué supone la 'Transformación de la práctica asistencial con la digitalización de los procedimientos'. En general, todos los ponentes se han mostrado de acuerdo en señalar que la digitalización conlleva ahorros de tiempo y económicos, aunque también acarrea una alta inversión y un gran coste personal de deshabituación y nuevo aprendizaje. 
¿Cómo ha evolucionado el diagnóstico odontológico en la era digital?¿Cuál es la situación actual?
Luis Molina, vocal de la Junta Directiva del Sector Dental de Fenin: En principio, la evolución es clara. Hemos pasado de no poder disponer de un paciente físico y trabajar con modelos de escayola o radiografías que permitían al profesional diagnosticar y posteriormente transmitir esa información a los laboratorios, a hacerlo con un paciente en 3D. Existen ya tecnologías que nos permiten hacer un escáner facial, hacer una radiología digital, un escaneado de la boca del paciente e incluso 'ver lo que no podemos ver, y comunicar a nuestro laboratorio, o a nuestro proveedor de servicios esta información. Ese es uno de los mayores avances porque una imagen vale más que mil palabras, y es más fácil comunicar con la cantidad de datos que podemos obtener a día de hoy.

Araceli Morales, secretaria de la Sociedad Española de Odontología Digital: El escenario ha cambiado absolutamente. Tenemos una gran ventaja, tanto en la comunicación con el laboratorio como en lo que a acelerar el diagnóstico por imagen se refiere. Ahora podemos explicar mucho mejor que con los modelos de escayola y la comunicación con los pacientes es mucho más fluida: ellos ven las cosas con más claridad y a nosotros nos permite también interaccionar y quizás conocer sus inquietudes de una manera más rápida. A veces podemos encontrarnos reticencias en algunos tratamientos, pero en general estas tecnologías digitales nos facilitan el trabajo.

Roberto Rosso, consultor de Marketing. Fundador y presidente de Key-Stone: Con respecto a los diagnósticos digitales, la revolución ha sido impresionante. Hace unos 15 años la Radiología cambió totalmente porque se solventaron dos problemas que tenían los dentistas: las dimensiones y el coste de las máquinas. Con la digitalización se empezó a hacer Radiología dentro de la clínica, y hoy por hoy más del 50 por ciento de las clínicas dentales españolas tienen un panorámico digital. Esto cambió también la relación con el paciente, su comodidad y la posibilidad de acceder al servicio inmediatamente, aparte de los aspectos médicos. Otra revolución ha llegado hace pocos años con la producción de dispositivos, lo que está modificando todo el flujo de la producción de la prótesis. Y es un cambio en el que todavía nos encontramos: un cambio que refiere dos mundos distintos, el del laboratorio protésico y el de las clínicas dentales.
Marta Bruna, secretaria del Departamento de Odontología y profesora del Máster en Ortodoncia Multidisciplinar Avanzada de la Facultad de Medicina de la Universidad San Pablo CEU: La situación ha cambiado notablemente. En el ámbito clínico, está claro, en aspectos como la relación con los pacientes y las mejoras biológicas (porque hay muchas situaciones en las que bajamos las dosis de las radiaciones, evitamos repeticiones…). Y en la docencia, desde las antiguas transparencias y dibujos que teníamos antes hasta ahora… Podemos a nuestros alumnos mostrar cráneos, cuerpos en 3D, e incluso que se puedan meter dentro de esos cuerpos y manipularlos.


¿Se puede cuantificar el ahorro de tiempo y recursos que supone la digitalización de procedimientos odontológicos?

Araceli Morales: Se reducen los tiempos de espera y la preparación. Cuando el paciente se marcha de la consulta, ya se tienen todos los datos,  'solo' hay que hacer el diagnóstico y valorar qué debe hacerse. Es cierto que, a veces, los programas exigen un tiempo de trabajo con el ordenador, pero cuanto más se invierte en tiempo de diagnóstico, mucho menos se emplea luego en el tratamiento en el buen sentido, en cuanto a que se producen menos molestias.


Luis Molina: Hasta ahora la Odontología es una rama que no estaba dominada por empresarios sino por personas que hacían una práctica sanitaria volcados en el paciente. Por lo tanto, no hay un estudio de costes sobre lo que vale una hora de sillón. Con el crecimiento de las grandes cadenas, que a día de hoy están manejadas por compañías de seguros y por empresas de crédito y caución, eso está cambiando. Han profesionalizado la cuestión de los costes y es indudable que la parte digital conlleva unos ahorros muy importantes. Muchos tratamientos reducen el número de visitas, por tanto, el tiempo del sillón, lo cual es una comodidad para el paciente, y económicamente es un ahorro para la clínica. Hay muchos procesos que se hacen de forma inmediata y una predictibilidad que evita tener que hacer determinadas pruebas. Por tanto, no es fácil cuantificar, y a día de hoy ni siquiera la industria sabe exactamente lo que suponen estos cambios. Pero sí que hay una aceptación por parte de todos: hay un ahorro en tiempos y a nivel económico. Luego hay que valorar la inversión y el retorno que tienen las clínicas. Pero indudablemente no solo hay mejora, sino que también se reducen los los procesos, y eso conlleva un ahorro directo.